Biden pone el eje en los organismos multilaterales

Se espera una política activa de Estados Unidos en la ONU, la OEA, la OMC, la NATO, con la idea de volver a convertirse en potencia rectora, en momentos en que China avanza globalmente en términos comerciales con la RCEP y de conexión e infraestructura a través de la Nueva Ruta de la Seda. Urge la recomposición de EEUU de la relación con Europa. TLCNA y América Central prioritarios para la consolidación de su zona de influencia cercana. Brasil, Mercosur y la Alianza del Pacífico.


Bs As, 21/01/2021.- El 20 de enero, al asumir la presidencia la nueva administración demócrata de Joe Biden, se dio curso a un nuevo enfoque en la política internacional de la potencia del norte, en busca de recuperar el terreno perdido en la era Trump. Como primera diferencia con su antecesor, el Gabinete de Biden podría ser caracterizado como una elite “especializada”, con trayectoria en universidades, Think Tanks y exfuncionarios/as de la gestión de Barack Obama, marcando una diferencia importante con el recorrido de los funcionarios de confianza de Trump (más vinculados al mundo empresarial), según lo describe CELAG en un reciente trabajo *.

Para Michael Shifter, presidente del Diálogo Interamericano y profesor de Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Georgetown, una diferencia muy marcada entre el actual Jefe de Estado y el Mandatario electo es que este último valora la diplomacia, los enfoques multilaterales y las alianzas tradicionales. “Esas alianzas, sobre todo con Europa, se han debilitado bastante en los últimos cuatro años. Biden buscará reconstruirlas y también reparar el daño, tarea que puede tomar tiempo”, se lee en el sitio Thedialogue.org.

Por su parte, Lawrence Gumbiner, analista internacional y catedrático de la Universidad Javeriana Bogotá, señala que el demócrata va a regresar a los Estados Unidos al campo multilateral. “El presidente Trump rechazó la política multilateral, prefiriendo hacer casi todo en una manera bilateral. Biden va a tener una política norteamericana activa en la ONU, la OEA, la OMC, NATO y las otras organizaciones importantes para los norteamericanos”, anota en entrevista con Kelly en elpais.co. Incluso volverá a reacomodarse la relación con la Organización Mundial de la Salud, OMS, lo cual es importante porque Washington es uno de los principales financiadores de esa entidad. Cabe recordar que el pasado 7 de julio la Administración Trump notificó formalmente a las Naciones Unidas que su país se retiraba de la OMS, aunque la medida no puede entrar en vigencia antes del 6 de julio de 2021.

La vuelta a los organismos multilaterales reviste gran importancia, en tanto EEUU pretende recuperar su rol de potencia rectora, en momentos en que China avanza globalmente en términos comerciales con la RCEP y de conexión e infraestructura a través de la Nueva Ruta de la Seda, que compromete a la Unión Europea en una alianza, que Trump malogró.

En América Latina, señala CELAG. En ese sentido, se refiere también al posible reimpulso a la Alianza del Pacífico como mecanismo de articulación de los acuerdos comerciales bilaterales de EE. UU. Incluso se habla de reactivar en el futuro el Acuerdo Transpacífico, al cual Trump también renunció, para ejercer de dique a la inversión china, lo que podría llevar a su reactivación, especialmente después de la consolidación de la RCEP (Regional Comprehensive Economic Partnership), como el mayor acuerdo comercial del mundo, superando a la Unión Europea y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA).

En términos de integración con América Latina, el flamante gobierno de Joe Biden asumió con un plan para los 11 millones de inmigrantes indocumentados del país, que acelerará el proceso para otorgar residencia legal en un plazo de 5 años y ciudadanía a los 8, a los ahora llamados “no ciudadanos”,

Por lo pronto, la visión de la nueva administración para la región, está basada en la creencia fundamental de que la promoción de un “hemisferio seguro, de clase media y democrático” es de enorme interés para la economía y la seguridad nacional de los Estados Unidos, asegura Juan Gonzalez en America Quarterly .

Posiblemente en alianza con México, se espera que Estados Unidos implemente planes de desarrollo para contener la inmigración desde los países centroamericanos, y -de acuerdo con CELAG-, use la Iniciativa de Seguridad Energética del Caribe, que desplazaría a Petrocaribe y la influencia de Venezuela en el área.

En lo que se refiere al Cono Sur, tendrá que buscar la forma de trabajar en alianza con Brasil, atrayendo al Mercosur a una Alianza del Pacífico que opere de ordenadora de la región. Sin embargo, Brasil aparece con su liderazgo desdibujado, por el controvertido socio de Trump, Jair Bolsonaro.

*Biden en América Latina: cambios y continuidades, Silvina Romano, Aníbal García Fernández, Tamara Lajtman y Arantxa Tirado, 15/12/2021, CELAG

Graciela Baquero