Empresas europeas piden subsidiar la Agricultura de Precisión

Las empresas europeas de maquinaria agrícola han reclamado a la Unión Europea (UE) incluir en la nueva reforma de la Política Agrícola Común (PAC) de 2020 el acceso a la tecnología de Agricultura de Precisión (AP) para todas las granjas del bloque.

Para la Asociación Europea de Maquinaria Agrícola (CEMA), la nueva PAC debería ayudar a mejorar el acceso a las tecnologías de agricultura inteligente y de precisión a través de una “Bonificación de Productividad Sostenible que se adaptaría al tamaño de la granja y se diferenciaría para diferentes tamaños”.

Fundamento

La agricultura en pequeña escala todavía domina la economía rural europea y el 86% de las granjas de la UE tiene un área inferior a 20 hectáreas. Ante esta situación, la industria sostiene que las soluciones avanzadas de maquinaria agrícola pueden ayudar a las explotaciones agrícolas, independientemente de su tamaño, a operar de manera rentable, competitiva y sostenible.

“Sin embargo, la evidencia económica disponible muestra que existe un fuerte vínculo entre el tamaño de una explotación agrícola y sus ingresos, y las granjas más grandes tienden a tener mayores ingresos y capacidad de inversión”, aclaró CEMA a través de un documento.

¿Cuáles son las tecnologías?

Los cambios en la política de promoción a la agricultura en Europa deberían incluir el acceso a las granjas de hasta 100 hectáreas a la tecnología vinculada con:

Sistemas de orientación.
Aplicaciones de velocidad variable (VRT) y detección de nutrientes.
Tecnologías de ganadería de precisión (PLF).

¿Cómo sería la ayuda?

Granjas con menos de 50 hectáreas. Como la mayoría de estas explotaciones no tiene acceso adecuado a las tecnologías de AP, “deben ser elegibles para un subsidio específico para invertir en tecnologías básicas o un comprobante para usar servicios contractuales”, preciso el documento de la industria.

Además, CEMA propone para este tamaño de granja crear un comprobante especial para comprar tecnologías de comunicación a pequeña escala con aplicaciones agrícolas, como teléfonos inteligentes, tablets, computadoras. Este vale especial y anual para tecnologías de menor escala podría estar en el rango de € 500 a € 750.

Granjas de 50 a 100 hectáreas. CEMA propone un sistema de dos niveles para esta categoría de granjas: podrían optar por la Bonificación de Productividad Sostenible o solicitar un subsidio o cupón específico de Tecnologías Inteligentes.

CEMA estima que un subsidio específico que oscila entre € 6.500 a € 7.000 sería adecuado para cubrir las necesidades básicas de AP de los agricultores de esta categoría de tamaño. El subsidio específico de Smart Technologies podría usarse para invertir en tecnologías avanzadas o para alquilar los servicios de un contratista certificado que cuente con estas tecnologías.

“En el caso de una inversión directa, la subvención podría asignarse en función del período de depreciación normal de la tecnología comprada, es decir, € 7.000 en cinco años, a razón de € 1.400 por año”, precisó la solicitud. Maquinac

 

Reunión clave de Mercosur para cerrar acuerdo con UE

La Asunción, 9 de febrero, (ABC).- Representantes del Mercosur y la Unión Europea (UE) tienen previsto reunirse en Asunción en la última semana de febrero para intentar cerrar el acuerdo de libre comercio entre ambos bloques. Desde finales de la primera semana de febrero, técnicos de ambos grupos están reunidos en Bélgica para ajustar diferencias y buscar cerrar un texto final.

A mediados de esta misma semana, los ministros de Relaciones Exteriores de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, los cuatro países que integran el Mercosur, viajaron a Bruselas, Bélgica, para reunirse con las autoridades de la Unión Europea con el objeto de dar un empuje político final al acuerdo de libre comercio que se negocia hace más de 20 años. En el último año la discusión tuvo un impulso político fundamental y representantes de los dos sectores aseguran que es momento de firmar el acuerdo.

La reunión de los ministros de Exteriores con las autoridades europeas fue a puertas cerradas y sin declaraciones oficiales. El objetivo más que nada fue hablar descarnadamente de las trabas y la forma de superarlas, confirmaron fuentes de la delegación paraguaya. Estas también admitieron que el encuentro fue positivo porque las dos partes ratificaron la necesidad de cerrar el acuerdo de libre comercio.

En ese encuentro los máximos representantes de ambos sectores acordaron tener una reunión a finales de febrero en Asunción y dieron instrucciones a los técnicos que están reunidos en Bruselas a fin de que en los próximos días hagan todos los ajustes que sean necesarios para llegar a un acuerdo.

La reunión en Asunción será clave para poder cerrar el acuerdo. El ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, dijo estar confiado que en ese encuentro se podrá cerrar finalmente el acuerdo. “Tengo expectativas porque son tres pilares: el político, el de cooperación y el económico. Los dos primeros ya están casi cerrados y faltan los ajustes necesarios para cerrar el tercero”, indicó.

El ministro de Relaciones Exteriores de España, Alfonso Datis, horas antes del inicio de la reunión dijo que la Unión Europea debe firmar el acuerdo con Mercosur y no dejar pasar la oportunidad. “América Latina está abierta al mundo y no podemos desaprovecharlo por estrechez de miras”, indicó.

Advirtió que la UE “lleva mucho tiempo sin prestarle la atención necesaria (a América Latina), un día se cansarán de esperar”.
 

El intercambio comercial

Las exportaciones de frutas y hortalizas comunitarias a los países de Mercosur en 2016 ascendieron a 241,3 millones de euros, según datos de la Oficina Europea de Estadísticas de la UE, Eurostat. Brasil ha sido el primer destino de las exportaciones comunitarias a este grupo de países, con 226 millones de euros, mientras que lo exportado a Argentina sólo alcanzó 9,9 millones de euros, a Uruguay 5,4 millones de euros y a Paraguay 38.000 euros.

Las importaciones hortofrutícolas de la UE procedentes de Brasil en 2016 se elevaron a 628,1 millones de euros, de Argentina ascendieron a 513 millones de euros, de Uruguay 43 millones de euros y no hubo importaciones de Paraguay.

En cuanto a España, las exportaciones de frutas y hortalizas frescas a Brasil de enero a octubre de 2017 se situaron en 78.967 toneladas, un 1% menos que en el mismo periodo de 2016 por un valor de 79,6 millones de euros (-13%). A Argentina ascendieron a 3.975 toneladas (+15%) por un valor de 2,8 millones de euros (+22%), a Uruguay fueron 885 toneladas (-46%) por un valor de 811.117 euros (-39%) y no hubo exportaciones a Paraguay.

En el sentido opuesto, las importaciones españolas procedentes de Brasil ascendieron a 72.484 toneladas, hasta octubre de 2017, lo que representa un incremento del 8% con relación al mismo periodo de 2016, por un valor de 81 millones de euros (+16%). En el mismo periodo, la importación de Argentina se situó en 69.983 toneladas (-30%) y 67,1 millones de euros (-50%), de Uruguay 12.657 toneladas (+1%) y 9,6 millones de euros (+1%) y de Paraguay no hubo importación española, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales procesados por FEPEX.