El primer desarrollo tecnológico binacional

En el marco de los estudios del desarrollo de tecnologías de uso dual, se comenzaron a pergeñar proyectos tecnológicos conjuntos entre los ejércitos de Argentina y Brasil, siguiendo la línea de los acuerdos del MERCOSUR. El primer proyecto, un Vehículo Estructural Multipropósito. Mientras tanto, con Chile se está desarrollando un proyecto informático relacionado con las Fuerzas de Paz.


La intención es desarrollar proyectos tecnológicos en común que permitan crear un ámbito de interés compartido en apoyo de las políticas de cooperación e integración regional, sobre todo en el marco de los acuerdos del MERCOSUR, destaca un trabajo del JEMGE.

El ámbito de la Ciencia y la Tecnología es especialmente apto para generar confianza mutua ya que, al compartir intereses en un aspecto tan sensitivo, se tiende al fortalecimiento de los lazos de amistad entre los países.

Esto permitirá en el mediano y el largo plazo, alcanzar desarrollos tecnológicos de punta que serían difíciles de lograr en forma individual y, al mismo tiempo, posibilitará ampliar el mercado y dar mayor impulso a la producción para la defensa, lo que significaría una alternativa de inversión para generar recursos y empleo.

En la relación entre los ejército de Argentina y Basil se coincidió en la intención de dar una solución conjunta a problemas tecnológicos que difícilmente podrían resolverse a través de la transferencia de tecnología desde los países más desarrollados.

Las conversaciones entre los responsables de las respectivas áreas tecnológicas, permitieron que, hacia fines del año pasado, los Jefes de ambos ejércitos, teniente general Roberto Fernando Bendini y general de ejército Francisco Roberto de Albuquerque, acordaran la realización de reuniones de trabajo periódicas, a fin de encontrar la forma más eficiente y rápida de iniciar una cooperación más estrecha en materia tecnológica.

En este marco se produjo la visita de un oficial superior del ejército del Brasil a Buenos Aires, que permitió determinar la dimensión del proyecto a encarar. Por otra parte se definieron las áreas de interés común, como los Sistemas de Simulación, Vehículos, Visión Nocturna, Robótica, Seguimiento Satelital y Sistemas de Comando y Control relacionados con el control del espectro electromagnético.

Se acordó que el primer proyecto conjunto debía ser de pequeña envergadura, corta duración y fácil realización, condiciones que ayudarían a su concreción. El proyecto en cuestión, un Vehículo Estructural Multipropósito, reúne las condiciones necesarias para alcanzar el éxito en el corto plazo y permitirá posteriormente, realizar en el mediano y largo plazo proyectos más ambiciosos. En la actualidad se han logrado definir las características generales que deberá tener el vehículo 4x4 para satisfacer las necesidades y exigencias operacionales de ambos ejércitos, así como sus características duales, refiere el informe.

Por otro lado ha ido gestándose con el ejército de Chile, un proyecto tecnológico relacionado con un sistema basado en tecnologías de la información, para apoyar el entrenamiento de unidades que deben participar en Operaciones de Paz, en el marco de Naciones Unidas.

El objetivo particular ha sido definido entre los representantes del área tecnológica de ambas fuerzas, en la última ronda de conversaciones que tuvo lugar en Santiago de Chile. Se trata de crear un simulador para el entrenamiento de personal de Fuerzas de Paz (ya sea contingentes, observador militar, jefe o miembro de una Plana Mayor e integrante de fracciones de combate), que permita instruirlo con eficiencia y a bajo costo.

Inserción en la comunidad empresarial

El trabajo destaca la inserción del ejército en la comunidad científica y empresarial, tanto estatal como privada, a través de proyectos de posible aplicación dual (uso civil y militar), con el propósito de incrementar la capacidad nacional en dos ejes fundamentales: la investigación y desarrollo (I + D), y la producción.

El camino hasta aquí recorrido permitió alcanzar acuerdos con distintas instituciones de gran prestigio, entre las que se pueden mencionar: la Asociación Argentina del Hidrógeno (AAH), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el Instituto de Investigaciones Aplicadas Sociedad del Estado (INVAP) y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).

El acuerdo alcanzado con la Asociación Argentina del Hidrógeno pretende establecer una plataforma de conocimiento científico-tecnológico, con el propósito de desarrollar la tecnología necesaria para la obtención, perfeccionamiento y optimización de pilas de combustión. Es un proyecto de alto valor estratégico, ya que el hidrógeno es considerado el combustible del futuro.

Gracias al acuerdo concretado con INVAP -prestigiosa empresa dedicada al desarrollo de tecnología de avanzada, entre ellas la nuclear- se está diseñando una computadora de altas prestaciones para uso en entornos desfavorables. También se está estudiando la propuesta por parte de la misma institución de realizar mejoras sobre los radares RASIT, con los que cuenta la Fuerza, para obtener su optimización y aumentar sus prestaciones en un entorno informático amigable.

Luego de un trabajo en conjunto, el INTI y el Ejército Argentino definieron problemáticas de interés común en las que podían trabajar. Así, se establecieron tópicos como la sustitución de importaciones, la difusión de tecnologías, la elevación de la calidad de los laboratorios del ejército, los aportes al Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología y la implementación de pasantías, postgrados e intercambios de capacitación. Distintos institutos y organismos de la Fuerza están hoy trabajando junto al INTI para concretar lo acordado en los estudios.

El más reciente de los acuerdos firmados es el que vincula al Ejército con la Comisión Nacional de Energía Atómica, para trabajar sobre temas como simulación, alimentos, medicina nuclear, energías alternativas, tecnologías duales y medio ambiente. Actualmente se está estudiando cómo aprovechar la capacidad de simulación desarrollada por la CNEA para dar respuesta a requerimientos operacionales de la Fuerza.

Esta convergencia entre distintas instituciones nacionales, además de optimizar el empleo de los recursos permitirá gradualmente, abordar proyectos que en forma aislada, serían económicamente imposibles, concluye el informe.

MABC